¡Hay que querer! Quererse y querer a las personas que nos rodean, ponernos en su lugar para entenderles mejor.
¡Hay que querer! Querer conseguir nuestros sueños, ponerse en acción y buscar la manera de lograrlos.

viernes, 31 de enero de 2014

Sólo una cosa

Sólo una cosa. Sólo una cosa más.Recuérdame.
Recuérdame mientras yo me las apaño para olvidarte.
En un amanecer a la orilla del mar, sí, ahí, recuérdame.
Recuérdame por cada lágrima que se esfumó por ti.
Recuérdame cuando decidas dejar de hacerlo.
Recuérdame por cada suspiro añorándote.
Recuérdame si ya no está en tu memoria aquel primer juego de miradas. 

jueves, 30 de enero de 2014

Fugaces


Se acabó una poción predestinada al fin.
Se acabó la demasiada química (palabras suyas).
Un inciso, ¿qué narices significa que un químico te diga que entre tú y él hay demasiada química? Porque me podría mostrar la fórmula con la que precipitamos o variarla cuando resulta un producto perecedero.
Y ya que estoy... ¿qué narices significa que un electricista te diga que eres su luz?
Tú me cortocircuitas, no te jod...

martes, 28 de enero de 2014

Debería


Debería estar en la fiesta a la que tenía planeado ir hace un día y cuarenta y siete minutos... y estoy en mi casa.
O debería estar en las fiestas de mi pueblo... pero estoy en el sofá que me acoge cada día.
O debería no beber una copa más... pero en estos momentos saber que el alcohol deprime y no ahoga mis penas, no es una evidencia que controle mi conducta.
O debería haber dicho hace demasiado lo que nunca me atreví a decir... y nunca lo dije y seguirá callado.
O debería no haber esperado, esperado, esperado y esperado... y sigo esperando.

jueves, 23 de enero de 2014

Hablando un poco de todo...


- Para mí, fue el sueño perfecto...
+ ... que se volvió pesadilla.
- ¿Pesadilla? ¡Jamás! Quizá... quizá se volvió un sueño... uhmm, un sueño que me acabó dando un doloroso despertar. Pero ese sueño no hubiera deseado nunca que acabara, no me hubiera gustado despertar, así que una pesadilla... no, no se volvió pesadilla.
+ ¿Y sigue el mismo sueño?
- Supongo, en cierta manera, puede que sí... Sigue algo similar a una nube vaporosa, que no sé si podría pertenecer al limbo de los sueños.. Quizá sí... o puede que no.... Lo peor es que del sueño, no sé cuándo desperté, no quise, o no supe hacerlo y supongo que en algún momento ocurrió. Pero no fui consciente, así que soñar ya no, no es lo que hago...

Se me olvidó

Al despertar no estabas en tu lado del colchón.
Has madrugado mucho hoy.
Se me olvidó decirte algo antes de que te fueras.
Se me olvidó decirte que he soñado contigo. Como tantas noches. Poca novedad. Estábamos en medio de un bosque jugando a póker, con 4 personajes más, super extraños. Flípalo. Una mujerona que mentía que se las pelaba y un ochentón de pelo blanco que sólo iba de farol en farol. Lo que viene siendo el "Farolelo", vamos. Los otros dos demasiado oscuros. Creo que uno te tiraba los trastos, por las caras que me ponías, pero lo peor... ¡íbamos perdiendo!

Perdidas perdidas

Echo de menos cuando nos comunicábamos con perdidas... ¿lo recuerdas?
Todo era... ¡más romántico! Incluso, más emocionante.
Ahora sólo hay wasap.
El wasap nos ha hecho fríos, nos ha convertido en emoticonos insípidos que repetimos como ovejas de rebaño... nos aborrega. A su manera, nos quita la libertad, tiene el poder de encontrarnos aquí y ahora, de no permitirnos desaparecer por momentos, ausentarnos del mundo, y volar, simplemente.
Nos localiza, nos perturba, nos recluye en un teclado qwerty.

En invierno

Te conocí un frío invierno, en una calle del centro. "No quiero saber que hoy empieza el invierno, ni los días cortos, ni las tardes oscurecidas, ni que esto acaba de empezar", te dije.
Puede que fuera por eso que instalaste la primavera en mi habitación.
Dicen que la primavera la sangre altera, y aunque bajo cero a un paso de mi ventana, desconocen la forma en que tú me alterabas. Témpanos de hielo en la cornisa, y cubitos de hielo para deshacernos. 
No estoy hecha para días grises, para temperaturas frías. No estoy hecha para climas que desmoronan mis días.
Te conocí en invierno, pero nunca fue mi estación preferida.

viernes, 17 de enero de 2014

Harta


Estreno año... no estreno situación mental, ni emociones, ni sentimientos, ni sueños, ni llantos, ni ilusiones, ni deseos, ni miedos, ni obstáculos, ni piedras que no me dejan caminar erguida, ni recuerdos, ni canciones que me emocionan, ni amigos, ni imágenes que ocupan mi mente día a día, ni ojalás, ni quizás... no... lamentablemente no estreno nada... sólo un número... justo ese número tenía que ser... uhmmm...
No estreno nada.
Mucho ha pasado últimamente, mucho o nada depende de cómo se mire... nochevieja... bonita noche... pensamientos de cierre... ¡Vaya amanecer!

domingo, 12 de enero de 2014

Segundas partes


Ahora lo sé. Hubiera sido mejor no volver.
Las segundas partes nunca fueron buenas.
Las segundas oportunidades se dan esperando un final, que lo más lógico es que no llegue.
¿Por qué insistimos? ¿Por qué volver a un destino que te evoca infinidad de sensaciones, pero en el no te vas a quedar a pasar el resto de tus días? 
Mucho mundo queda por descubrir... Sí, seguramente esta razón sería una que haría volver: mucho queda por desvestir de los lugares que alguna vez visitamos.

miércoles, 8 de enero de 2014

Roma

Eres como Roma.
¡Me fascinas, me vuelves loca, me gustas, me motivas, me encantas, me mueves, me alteras, me inspiras, me seduces, me estimulas, me impactas, me impresionas!
Pasta italiana, gelato... cada bocado tuyo es el placer para mi paladar entristecido.



viernes, 3 de enero de 2014

Jugando

No te creas, ni voy a decirte lo que quieres escuchar, ni quieres escuchar lo que te diría.
O mejor, puedes creerlo y descreerlo, porque así habrás tenido en algún momento, una esperanza... ¡como yo! 
La vida es más sencilla cuando ocultamos, cuando callamos, cuando fingimos... haciendo el papelón del siglo.
Paradójicamente, lo más complicado suele ser, ser como realmente somos, hacer lo que sentimos a flor de piel, explicar lo que nuestra mente nos muestra con claridad absoluta, mostrar en una forma políticamente correcta los miedos que nos avasallan... y las pasiones.
Absurdo.